Nélida Fernanda Campos Galarza
 |
| ;Miguel de Unamuno (1864-1933) |
En este libro hizo que me preguntara algo todo el tiempo mientras lo estuve
leyendo ¿Qué es mejor un verdad trágica o una felicidad falsa? Durante el
transcurso de la obra se nos plantea lo bueno y entregado que es Manuel Bueno
con el pueblo, al ser el párroco del pueblo su relación con la gente es muy
cercana, todos lo quieren y lo
consideran un ejemplo de fe y devoción a seguir, además que el tener cerca un
hombre como él les da una gran felicidad y les sirve de guía. Solo un hombre se
entera del secreto de Manuel por medio de éste. Este hombre, de nombre Lázaro,
es escéptico y está en contra de las doctrinas de la iglesia y siente un poco
de rencor hacia Manuel, sin embargo cuando se entera de que Manuel en realidad
no tiene fe, no cree en dios ni en la resurrección de los muertos; su actitud
hacia el cambia ya que se da cuenta de que en realidad quiere hacer felices a
la gente que está a su alrededor. Por ayudarlo, Lazaron se “convierte” y deja
de ser escéptico.
Juntos hacen lo mejor por la felicidad de la gente sin embargo Manuel es atormentado internamente por sus dudad y su incapacidad de creer en lo que
predica. La gente lo ve como un gran hombre alegre, bondadoso y seguro de si mismo y de dios por esto
Manuel siente que es su responsabilidad mantener esa creencia a pesar de su
propio sufrimiento y tristeza.
Se me hace muy sacrificado vivir de esta forma ya que aunque, al morir
te puedan recordar de la forma que te tal vez te gustaría, no importa en lo
absoluto si no pudiste disfrutar de esa vida por ti mismo. Manuel Bueno muere
siendo considerado un santo fiel a dios, esto para mi es muy triste y me pregunto porque
no puede ser considerado y recordado como lo que realmente fue: un hombre
solidario que entrego su propia comodidad emocional para lograr la felicidad en
los demás.
No hay comentarios:
Publicar un comentario